
Catar, un país más allá del fútbol
Hace unos meses se celebraba en Catar la Copa Mundial de la FIFA. Desde entonces, a muchos les empezó a sonar este pequeño país de algo más de 11.000 kilómetros cuadrados, situado en el corazón de Oriente Medio, rodeado por el Golfo Pérsico y a tan sólo 7 horas de vuelo desde Madrid, y les surgió la curiosidad por saber más de él.
La verdad es que Doha, la capital de Catar, va mucho más allá del deporte rey. Es una ciudad repleta de cultura, museos, modernísima arquitectura, exquisita gastronomía, ecléctica fauna y flora, paisajes idílicos, un mar cristalino e increíbles dunas. Lo primero que sorprende nada más llegar a Doha, es su skyline. En las últimas décadas, la ciudad ha sufrido una gran transformación. La grandiosidad del paisaje urbanístico de la ciudad resplandece por la noche y se torna majestuoso visto con la luz del sol. Nombres ilustres como Jean Nouvel o Ibrahim M. Jaidah, han plasmado su impronta en espectaculares edificios que dejan con la boca abierta a su paso:
Doha Tower (El abrigo de encaje). Jean Nouvel. También conocido como Burj Doha, es uno de los edificios más distinguidos del horizonte de la ciudad. La Torre de Doha es una reluciente cúpula plateada durante el día y cobra vida como una espiral dorada de luces por la noche. En sus 46 plantas hay 3.625 luminarias LED hechas a medida, que permiten que el edificio destaque en el colorido horizonte.
Rosewood Doha. (El arrecife de coral de la capital). Ibrahim M. Jaidah. Inspirado en el mar, sus dos torres adyacentes están rodeadas de fachadas blancas perforadas, similares al coral, que ayudan a limitar el acceso del calor a los edificios. El enfoque del diseño se centra en respetar la zona natural circundante.
The Torch Doha (La luz que nos guía). También conocido como Aspire Tower y con 300 m de altura, este rascacielos es el edificio más alto de Catar. La torre de 51 plantas está diseñada para representar una antorcha colosal, en forma de pétalo y su cúspide albergó la llama de los Juegos Asiáticos de 2006. The Torch Doha es ahora un hotel de cinco estrellas y alberga el restaurante giratorio, Three-Sixty, en la planta 47, que ofrece vistas panorámicas del horizonte de Doha. La silueta única del hotel presenta un espectáculo nocturno de luces cinéticas que puede disfrutarse desde kilómetros de distancia.
El Raffles Doha and Fairmont Doha (Las espadas de la cimitarra). Este emblemático y singular edificio cuenta con dos torres de 40 plantas entrelazadas, cada una de ellas con la forma de una espada cimitarra representada en el emblema nacional de Catar. Bajo las torres encontramos jardines inspirados en el nido de un halcón.
Qatar Navigation Tower (El reloj solar). Este edificio de 53 plantas tiene la particularidad de funcionar como un reloj solar. Dos paneles estrechos del edificio están orientados al este y al oeste, en línea con la salida y la puesta del sol, y dos paneles curvos más grandes están orientados al norte y al sur, combinándose para crear una brújula de navegación.
Tornado Tower (El ojo de la tormenta). Esta torre está diseñada para representar un tornado en el desierto. La fuerza giratoria de un tornado se exhibe en el exterior del edificio a través de una escultura de luz cinética realizada por el renombrado artista de la luz alemán Thomas Emde. El sistema de iluminación programable es capaz de producir más de 35.000 variaciones de patrones de iluminación para crear impresionantes efectos visuales por la noche.
Y podríamos seguir y seguir porque la lista es interminable, pero Catar es mucho más y entre este paisaje de cemento y cristal encontramos otras dos maravillosas joyas arquitectónicas: El Museo Nacional de Catar y el Museo de Arte Islámico.
El Museo Nacional de Catar fue diseñado por el arquitecto Jean Nouvel, ganador del Premio Pritzker y se abrió al público el 28 de marzo de 2019, reemplazando al anterior que se inauguró en 1975. Es un precioso edificio de 40.000 metros cuadrados que se inspira en las conocidas "Rosas del desierto" en el que podemos descubrir la historia del país y su progreso a través de los siglos.
A lo largo de sus once galerías alberga una multitud de objetos arqueológicos y patrimoniales, manuscritos, fotografías, joyas y trajes que ofrecen diferentes perspectivas y experiencias multisensoriales de diferente calado. Tiene más de 1,5 millones de perlas, así como diamantes, rubíes, esmeraldas y zafiros engarzados en oro y tejidos sobre una base de seda y fino cuero de ciervo, e ilustra el uso generalizado de las piedras preciosas en la región. Un museo que no deja indiferente a nadie, por dentro y por fuera.
El segundo fue diseñado por el célebre arquitecto chino y ganador del Premio Pritzker I.M Pei (famoso por haber diseñado la Pirámide del Louvre). Edificado sobre una isla artificial, los motivos islámicos tradicionales (cúpulas, figuras geométricas, arcos, elementos de agua) se fusionan con la arquitectura moderna dando lugar a uno de los espacios más emblemáticos de la ciudad. En él encontramos la mayor colección de arte islámico del mundo procedente de varios continentes que aglutina cerámicas, piezas de cristal, azulejos, pinturas y alberga una biblioteca patrimonial, con una colección de 21. 000 libros, incluidas 2000 ediciones únicas tanto en árabe como en inglés.
Pero cualquier capital árabe que se precie ha de tener un gran mercadillo, y en Catar descubrimos uno muy especial llamado Souq Waqif en el que la gastronomía, las especias, alfombras, antigüedades, artesanía, souvenirs, perlas o los hospitales para halcones caminan de la mano a través de unas calles impias y bien estructuradas que, la verdad, se asemejan a un decorado de película.
A la salida del zoco, unas escaleras mecánicas llevan a los visitantes hasta el centro de Doha, un paseo que combina el antiguo patrimonio de Catar con su vibrante futuro. Msheireb es el primer proyecto de regeneración sostenible del centro de la ciudad y comprende más de 100 edificios que albergan galerías de arte, tiendas y cafés. Además, podrás hacer tu recorrido a pie, en bicicleta o en transporte público (no te pierdas su singular y modernísimo metro).
Dejamos el centro y cogemos el autobús lanzadera que va desde el estacionamiento de la Ceremonial Court para desplazarnos a la impresionante Biblioteca Nacional. Diseñada por Rem Koolhaas, el exterior en forma de diamante, oculta su espacioso interior, que prioriza la luz y la visibilidad y conecta a la perfección con el mundo exterior. Las estanterías son piezas fundamentales del edificio y se elevan desde el suelo a modo de escalera y se mezclan con una arquitectura rompedora que llama la atención nada más traspasar el umbral de su puerta. Su tecnología innovadora se integra de forma armoniosa por todo el edificio, destacando la accesibilidad y el rendimiento y, además, la Biblioteca dispone de un Laboratorio de Conservación y Preservación dedicado a la restauración de elementos mientras que las vitrinas climatizadas ayudan a preservarlos. Un lugar que no deberías perderte.
Pero si Doha es alucinante, no lo es menos su desierto, uno de los pocos lugares del mundo en donde el mar se adentra en las maravillosas dunas y reconocido por la UNESCO como la mayor reserva natural de Catar. Podemos acampar, hacer parapente, disfrutar de un delicioso almuerzo mirando al mar en un elegante resort, maravillarnos con preciosas puestas de sol, pasear en camello o hacer un recorrido en 4x4, estamos seguros que cualquiera de estos planes convertirá tu visita al desierto en algo inolvidable.
Para los fans de los productos ecológicos y naturales nuestra recomendación es que visiten Heenat Salma Farm, una granja agrícola en activo que siembra más de 30 cultivos diferentes, frutas y verduras, así como produce lácteos, huevos, miel y carne, y un centro de hospitalidad, educación y bienestar. Los viajeros pueden pasar la noche en tiendas tradicionales situadas alrededor de una hoguera central o disfrutar de su coqueta piscina, su biblioteca o de sus comidas sanas y nutritivas elaboradas con producto Km.0
Por cierto, llegar a Doha es realmente sencillo desde prácticamente cualquier lugar del mundo y cuando aterrices en su Aeropuerto Internacional lo harás en el "Mejor Aeropuerto del Mundo" según Skytrax. Un lugar para perderse y disfrutar de las mejores compras, salas Vip, restaurantes o, por qué no, descansar en cómodas butacas reclinables en un entorno tranquilo mientras esperas tu próximo vuelo.
Catar te espera. Busca hueco en tu agenda y prepárate para VIVIR CATAR CON LOS CINCO SENTIDOS.