Las fiestas de La Paloma tienen un nuevo himno, pero esta vez no se canta… se saborea sorbo a sorbo. Desde su privilegiada ubicación sobre el cielo de Madrid, Ginkgo Restaurante & Sky Bar presenta “Atardecer Castizo”, un cóctel exclusivo que captura el alma de las verbenas de agosto, los colores del cielo al atardecer y el sabor inconfundible de la capital más auténtica.

Este cóctel de autor no solo rinde homenaje a las fiestas más queridas del verano madrileño, sino que lo hace con una receta que narra una historia a cada sorbo:

La receta del atardecer más madrileño

50 ml de vermut rojo

Como no podía ser de otra forma, el vermut pone la base. Símbolo eterno del aperitivo en las tabernas del centro, este toque nos transporta a las tardes castizas de Lavapiés o La Latina, donde las risas fluyen entre mantones y claveles.

10 ml de gin con cítricos

Una chispa moderna, aromática y refrescante. Como el contraste entre lo clásico y lo actual que define a las verbenas de La Paloma, este gin infusionado aporta un guiño vibrante al cóctel.

10 ml de Pedro Ximénez

Dulce, profundo y envolvente. Este vino andaluz pone la nota melosa que evoca la calidez de agosto, los bailes en la plaza y el paso lento por las calles engalanadas.

Un dush de bitter casero de chocolate y naranja

Hecho en casa por el equipo de mixología de Ginkgo, este bitter combina el amargor del chocolate con el frescor cítrico. Es el equilibrio perfecto entre nostalgia y chispa, como una copla cantada al caer la tarde.

Decoración con gilda castiza

¿Y cómo no acompañarlo con una gilda? Ese pincho atrevido y salado que añade personalidad al cóctel, como los chulapos que se lanzan a bailar un chotis. Un guiño audaz, festivo y lleno de sabor.

Con esta creación, Ginkgo Restaurante & Sky Bar no solo celebra las fiestas de La Paloma: las saborea. “Atardecer Castizo” es más que un cóctel, es una postal líquida de Madrid desde las alturas, un sorbo de tradición reinterpretada con elegancia y vista panorámica incluida.

Y lo mejor: aunque nace para celebrar la semana más castiza del año, “Atardecer Castizo” se quedará de forma permanente en la carta del restaurante. Porque cualquier día se puede celebrar el atardecer de Madrid, si se brinda con estilo y raíces.

Desde lo alto de la Plaza de España número 3, Ginkgo se reafirma como uno de los rooftops más deseados de la ciudad, donde la gastronomía y la coctelería de autor se dan la mano con unas vistas memorables.

Así que este agosto —y siempre—, súbete al cielo de Madrid y déjate conquistar por el cóctel que ya es más castizo que un mantón de manila, porque sí, en Ginkgo Restaurante & Sky Bar, estas fiestas de La Paloma, no solo se viven…también se saborean sorbo a sorbo.

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