El Lagar de Valleseco, un paraíso terrenal con la sidra como protagonista.

Begoña A. Novillo24/05/2025
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En la localidad de Valleseco (su nombre engaña, es uno de los pueblos más verdes y húmedos del territorio), a casi 1.000 metros de altitud, encontramos el Lagar de Valleseco, un lugar que no hay que perderse si viajamos a la isla de Gran Canaria. Allí, Ángel Domínguez elabora una deliciosa sidra que ha recibido numerosos premios en concursos tan prestigiosos como el Internacional Wine & Spirits Awards entre otros, algo insólito tratándose de una sidra elaborada fuera de Asturias.

Ángel Domínguez Ponce cultiva en 3 hectáreas de finca ecológica manzanas Reineta que dan lugar a una sidra de gran calidad, buena acidez y baja en sulfitos, elaborada de manera artesanal y una graduación de entre 7º y 9º (las asturianas tienen 4-6º) debido a la climatología de la zona.

Para su creación, utiliza unos 5.000 kilos de manzana al año, que traduce un total de 2.500 litros de sidra, y su proceso se inicia cuando empieza la recolecta de fruta, en octubre. Una vez lavada y triturada, las manzanas se prensan para extraer todo su jugo, un zumo que fermentará durante 20 días más en tanques de acero inoxidable. Se realiza una segunda fermentación de maloláctica a láctica y se hace un filtrado para quitar impurezas. Superados estos pasos, solo quedan uno más, envasarlo en botellas de cava que terminarán de darle la presión necesaria para convertirla en una sidra espumosa y deliciosa.

facebook.com/sidralagardevalleseco