Zagal 1200 es una pollería de diseño, que vuelve la mirada hacia la tradición con un toque moderno, donde los grandes protagonistas son la materia prima y el mimo del producto.

Una firma que llega para romper moldes y convertirse en el punto de referencia de los amantes de la alimentación honesta, ya que se trata de un concepto que da un giro sobre la compra y consumo del pollo, volviendo a los orígenes y acortando el camino que recorre este producto del campo a la mesa. Una vuelta al pasado que rememora los almuerzos típicos de antaño, un concepto nuevo que le otorga a este alimento el protagonismo que merece, pese a su aparente sencillez.

Respecto al nombre, Zagal es un nombre que hace referencia a los pastores jóvenes, rindiendo así homenaje a los oficios tradicionales y a la vida rural. Por su lado, el número 1200 equivale al peso óptimo de un pollo al carbón de calidad. Y es justamente la calidad la que rige en todos los detalles para cada de uno de sus platos. Para conseguirlo, recuperan antiguos métodos tradicionales desde el origen de la materia prima hasta su cocinado.

Y es que, a diferencia de otros asadores de pollo, en Zagal 1200 el producto se elabora en hornos especializados de carbón seleccionados expresamente tras una exhaustiva investigación para conseguir el mejor sabor.

En un pequeño espacio de lo más acogedor, en el que la decoración traslada al cliente a una atmósfera rústica, un baúl de los recuerdos en el campo y la granja, Zagal 1200 ofrece a sus comensales la posibilidad de degustar in situ sus productos gracias a mesas bajas que alternan sillas y bancos. También dispone de una barra alta, ideal para degustar un vino entre amigos. El lugar perfecto para celebrar eventos íntimos en los que el cliente puede disponer del restaurante en su totalidad sintiéndose como en casa.

Su carta ofrece dos tamaños de pollo, medio o entero, alitas al carbón y sándwiches espectaculares como el ‘Calimero’ a base de Pan de cristal, pollo al carbón desmenuzado, pimientos a la brasa, Edam y mayonesa de chimichurri o el ‘Piolín’ compuesto por Pan Brioche, pollo al carbón, cebolla caramelizada, Edam, mostaza de Dijon y Rúcula, entre otros.

Aquí la consigna es que el pollo manda, pero sin olvidar la importancia de las guarniciones; Patatas rústicas o Ensalada de Tomate, así como verduras de la huerta hechas al carbón. Todo ello, perfecto para mezclar con una gran variedad de salsas artesanales como la Salsa de Cebolla al Pedro Ximénez, la Chimichurri o la Bourbon.

Pero su oferta no acaba aquí, ya que también ofrece recetas tradicionales de productos de temporada y dispone de una pequeña muestra de tienda gourmet con vinos y productos excelentes, que sorprenden a los paladares más exigentes. Sin olvidarnos, claro está, de sus postres, muy necesarios ya que como indica su carta “Lo que bien empieza bien acaba”.

Un espacio al alcance de la mano de todos, que ofrece tanto servicio de take away, pensado para las múltiples familias y oficinas que se encuentran en su radar, así como de delivery a través de su página web o de plataformas como Glovo y UberEats, que lleva lo mejor de la cocina tradicional a casa, reviviendo así la FELICIDAD de antes.

zagal1200.com